imaginario' aparece también en las siguientes entradas: alegórico - ideal - fantástico - ficticio - figurado - honorario - honorarios - ilusorio - incorpóreo - inexistente - inmaterial - irreal - mitológico - nominal - pretendido - quimérico - representativo - simbólico - teórico -
Elobjeto al que el yo tiende es imaginario. El objeto que causa el deseo es real. El deseo no es voluntad dirigida a una imagen. Es lo que no sabemos. También en este sentido, que remite al inconsciente del lenguaje, el deseo es deseo del otro. Pero sólo a través de la palabra se puede acceder a él. Esa tensión se expresa en la rivalidad
Loimaginario social y el individuo En una entrevista ofrecida en 2007, Néstor García Canclini afirma que el imaginario no solo es representación simbólica de lo que ocurre, sino también es el lugar de elaboración de insatisfacciones, deseos, búsqueda de comunicación con los otros.19 C. Castoriadis converge, por su parte, en este punto sentido hay que tener en cuenta que el psiquismo se divide en tres registros: «Lo real es aquello que se distingue, en psicoanálisis, de los otros dos registros: lo simbólico y lo imaginario. Lo simbólico designa aquellos fenómenos estructurados como un lenguaje, lo imaginario, aquellos donde predomina la imagen del semejante. Lo real esRealidade irrealidad. Como punto de partida, supongamos que lo Real es el total de lo que existe mientras que la realidad es el conjunto de las cosas tal y como el ser humano las recibe y las interpreta. La realidad humana depende de la percepción y, en consecuencia, de los sentidos. Habría, por tanto, tantas realidades como seres humanos yEncambio, cuando la imaginación es débil, normalmente no se confunde con la realidad. Lo que se concluye es que si la imaginación se vuelve lo suficientemente fuerte o vívida, puede llegar a Portanto, el imaginario es un fenómeno individual en su origen: “se presenta, no como una gramática ordenada de inteligibilidad del universo, sino como una composición relativamente libre e irrefutable, en la medida en que no ha de rendir cuentas a ningún tipo de racionalidad” (Baeza, 2000, p. 22); construye realidades independientemente del
Así el pensamiento orientalista supone una voluntad -a través del conocimiento- de "controlar, manipular y hasta incorporar, aquello que es un mundo manifiestamente diferente (o alternativo y nuevo)" (Said, 1990: 24). La relación poder-conocimiento sobre Oriente se expresa en las geografías imaginarias a las que se refiere Said.